Do it easy!
¡Hazlo fácil!
Para muchos de nosotros más sencillo decirlo que hacerlo. Resumir, sintetizar, abreviar; ir directo a la médula. Ser capaz de aplicar criterios de eficiencia a nuestra propia manera de hacer.
Un ejemplo, lo lanza Hacienda:
El camino más corto no siempre es el correcto pero hacerlo fácil es un síntoma de madurez de las ideas. Quién no se ha parado a pensar lo infinitamente complicado que puede parecer un trámite de la administración.
Estamos instaurados, administrativamente, en la cultura del papeleo. Hay que hacer las cosas más fáciles. Hay que pensar en clave de proceso, en clave de eficiencia y, sobretodo, en clave ciudadana.
Para ello, es el momento de revisar los procesos de la administración pública, reelaborar los circuitos de la tramitación, aplicar tecnología, digitalizar y permeabilizar las instituciones.
Posibilidades públicas hay, también experiencias y casos de éxito sobre ello. Falta talento, motivación y capital humano, me explico: no cualquier persona vale solo los que quieran el cambio.
Si Hacienda puede, todos podemos. Ya sabéis aquello de “Hacienda somos todos”.
Comentarios